13 de octubre de 2021
SINAI
Muchas empresas de todo el mundo se han fijado objetivos ambiciosos para reducir sustancialmente sus emisiones de carbono en los próximos años. El primer esfuerzo multilateral para hacer frente al aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) se remonta al Protocolo de Kioto de 1998 . El Protocolo de Kioto estableció un amplio sistema de seguimiento, revisión, verificación y cumplimiento para garantizar la transparencia y exigir responsabilidades a empresas y gobiernos. En virtud del Protocolo, se controlaron las emisiones reales de muchos países y existen registros completos de las transacciones realizadas.
Frente a los compromisos jurídicamente vinculantes, persiste el reto de reducir las emisiones de carbono de forma rentable.
Que las curvas de coste marginal de reducción (MAC).
Los responsables políticos y las empresas utilizan las curvas MAC para ilustrar los aspectos económicos de la mitigación del cambio climático y contribuir a la toma de decisiones a la hora de desarrollar estrategias internas sobre el carbono. El concepto de curva de reducción del carbono existe desde principios de los años 90 para ilustrar el coste asociado a la reducción del carbono.
En este artículo, los expertos en gestión de emisiones de GEI del SINAI definen el coste marginal de reducción y qué es una curva de coste marginal de reducción. También explicamos cómo calcular los costes totales de reducción para a sus líderes de sostenibilidad y lograr un crecimiento real para su empresa.
Los costes de reducción perjudican a los beneficios de una empresa, al tiempo que afectan a su reputación entre los consumidores, que cada vez exigen prácticas más ecológicas. En determinados sectores, los costes de reducción pueden afectar significativamente a una empresa.
Tomemos, por ejemplo, el caso de una empresa industrial a la que la Agencia de Protección del Medio Ambiente de Estados Unidos (EPA) exige que limpie la contaminación generada por un centro de fabricación, transformación o vertido de residuos. La mayoría de las veces se trata de costes de reducción.
Al referirse a las tasas de reducción, el término "coste marginal de reducción" también alude al beneficio marginal necesario para reducir eficazmente la contaminación.
El cálculo de una curva de costes marginales de reducción, también conocida como curva MAC o MACC, consiste en determinar la rentabilidad de las reducciones de las emisiones de gases de efecto invernadero. reducción de emisiones de GEIpor ejemplo, comparando los residuos tóxicos de una empresa con las iniciativas de reforestación que financia.
El coste marginal de la reducción se refiere a la pérdida marginal en los beneficios de la empresa por evitar la última unidad de contaminación o al coste marginal de alcanzar un objetivo específico de contaminación debido a cierto grado de producción.
Cuando existen varias fuentes contaminantes, cada una con una curva de costes marginales de reducción diferente, la cantidad eficiente de contaminación debe equilibrar el coste marginal de reducción en los distintos sectores. Esto puede lograrse utilizando herramientas y técnicas basadas en el mercado, como permisos negociables y tasas por emisiones, por ejemplo.
Una curva de costes marginales de reducción (MAC) es una popular herramienta política que ayuda a su empresa a identificar el potencial de reducción de emisiones de GEI y los costes de reducción relacionados.
Las curvas MAC se utilizan para diversas cuestiones medioambientales en distintos países y se aplican cada vez más en la política gubernamental sobre cambio climático y en las estrategias climáticas de las empresas.
Históricamente, las complejas decisiones en materia de política climática se basaban parcialmente en las curvas MAC, lo que ofrecía pros y contras a la hora de ayudar a una empresa a medir, seguir y reducir sus emisiones de carbono. No obstante, las curvas MAC son una política beneficiosa para las empresas. Muchas empresas confían exclusivamente en su curva MAC, lo que les proporciona una guía accesible para un análisis sólido. Esto ayuda a informar mejor sus estrategias de carbono a medida que sale a la luz más información sobre los costes y la eficacia de las políticas. Lea nuestro reciente artículo que entra en detalle sobre los retos y ventajas de utilizar una curva MAC.
Calcular los costes totales de reducción es una tarea compleja.
Utilizando como ejemplo el país de México, se puede ver que el ejercicio de formular una curva MAC produce información valiosa que puede informar el desarrollo de la estrategia de carbono de su empresa. En 2020, México obtuvo importantes beneficios económicos gracias a un enfoque que tuvo en cuenta su sector del transporte, junto con el nivel de emisiones que se redujeron. El país también pudo reducir los costes asociados a los procesos de mitigación basados en la deforestación evitada, el tratamiento del agua y los vertederos.
Crear una curva MAC manualmente puede llevar mucho tiempo y ser extremadamente difícil. Para asegurarse de que la curva MAC de su empresa refleja la evolución más reciente de sus condiciones, necesitará un sistema que automatice las actualizaciones esenciales.
Utilizando la solución de software de SINAI, su empresa puede construir una curva MAC sólida que incorpore opciones de mitigación específicas del sector y tenga en cuenta las necesidades únicas de previsión relacionadas con el clima de su empresa, independientemente de la etapa de su viaje de descarbonización en la que se encuentre.
Con una gestión inteligente de las emisiones de GEI, su empresa podrá supervisar y gestionar el riesgo climático de forma rápida y sencilla. Tome mejores decisiones empresariales que se ajusten a sus objetivos acordados de reducción de emisiones, utilizando datos y conocimientos precisos y accesibles. Para ver cómo la plataforma de SINAI puede revolucionar la forma en que su empresa calcula, rastrea y mide sus emisiones de CO2, póngase en contacto con nosotros para una demostración de nuestro software hoy mismo.